La hormona del amor también se produce al hacer deporte

Es un hecho que practicar ejercicio mejora el estado de ánimo, reduce el estrés, facilita la concentración, mejora la condición física, aumenta la autoestima, eleva el estado de ánimo, potencia la productividad, previene el deterioro cognitivo, ayuda a sentirnos mejor, a ser más felices, entre otros beneficios. ¿Pero sabías que el deporte también produce la misma hormona que se genera al estar enamorado? La clave está en la oxitocina.

Durante la práctica deportiva, nuestro organismo es capaz de generar hasta más de 50 hormonas diferentes. Estas sustancias químicas son segregadas de forma natural por glándulas que tenemos en el cuerpo, y se encargan de que el organismo cumpla correctamente sus funciones.

Entre ellas, se encuentran las endorfinas, la serotonina, la dopamina y la oxitocina, que son las responsables de producir esa sensación placentera o de bienestar. Juntas, se les conoce como “el cuarteto de la felicidad” y sus efectos pueden durar horas después de haber terminado el entrenamiento.

A continuación, te informaremos sobre qué pasa con cada una de estas hormonas para que te sientas feliz y relajado después de practicar deporte:

Dopamina: Esta es la hormona que produce la sensación de placer, es la responsable de estimularte a continuar haciendo ejercicio y está directamente relacionada con los objetivos que nos marcamos.

Con el deporte regularás tus niveles de dopamina, de esta forma se te hará más fácil evitar otras formas menos saludables de obtener placer, como los dulces, el alcohol o el tabaco.

Además, la dopamina mejora la capacidad de aprendizaje y la memoria. La puedes obtener haciendo 20 minutos de ejercicio aeróbico intenso, como correr o andar en bicicleta.

Serotonina: Nuestro cuerpo usa esta hormona para hacernos sentir bien, pero también se encarga de que descansemos correctamente y de regular nuestro apetito.

Los niveles altos de serotonina te harán tener sentimientos positivos e incluso levantarán tu autoestima, haciéndote sentir mejor contigo mismo.

Endorfina: También conocida como “morfina natural”, esta hormona tiene potentes efectos analgésicos y ansiolíticos. Se encarga de reducir la sensación de dolor, y anular las emociones y sensaciones negativas.

Para conseguir un nivel óptimo de endorfinas, te recomendamos practicar 30 o 45 minutos de ejercicio a un nivel de intensidad suave o medio como correr, nadar o remar, entre otros.

Oxitocina: Esta es la hormona más sociable de todas, por eso se le llama “la del abrazo”, ya que facilita la unión emocional y el vínculo afectivo con los que te rodean.

Por supuesto, no se obtiene sólo a través de los abrazos, sino también de otras actividades físicas como, por ejemplo, baila y hacer deporte.

Su acción genera un sentimiento de confianza y aprecio hacia los demás, y una sensación de calma y profundo bienestar.

Queda claro entonces que el amor y el deporte están muy vinculados, generando hormonas similares y generando múltiples beneficios para nuestra salud física y emocional. Enamórate de hacer ejercicio si aún no te animas a empezar, y si ya lo hiciste, afianza tu relación. En Aictive estamos dispuestos a ayudarte, escríbenos para que realicemos una evaluación de tus movimientos en tu centro deportivo, gimnasio o en tu casa, para optimizar tu performance y aprovechar al 100% estos beneficios.